Mikel
Agirregabiria Agirre
Cada
papeleta es un tesoro que debemos administrar cuidadosamente
El voto es un derecho
individual de cada elector. Cada ciudadano elige libremente su candidatura, por
el método que mejor le parezca. Cabe suponer que, al igual que los partidos,
son múltiples los criterios por los que se escoge la papeleta entre las
distintas opciones. Así pues existen tantas motivaciones de voto como votantes,
pero pueden enumerarse algunas de las fórmulas más habituales.
Las encuestas
preelectorales se han erigido como uno de los factores más decisivos en la
elección final. Este avance anticipado y medianamente fiable de los resultados
globales, condiciona e incluso permite clasificar los métodos por los que se
elige el definitivo voto.
Voto útil: Que logra
representación para defender aproximadamente las ideas propias.
Voto fútil o inútil: El que
no obtiene escaño alguno, porque se pierde en la urna.
Voto mercantil o bursátil: Que prefiere sólo por ventaja económica propia, y se
elige desde la cartera.
Voto hostil o proyectil: Que elige al partido más opuesto de lo que más se
aborrece.
Voto dúctil o versátil: Que escoge al que cree que va a ganar, sólo para
acertar.
Voto mástil: Que se selecciona únicamente para dejar constancia de su
existencia.
Voto volátil o portátil: Que se administra frívolamente a última hora.
Voto reptil: Que se otorga al adversario para empeorar la situación.
Voto infantil o estudiantil: De quienes votan por primera vez con un variable
conocimiento previo, pero con de alta capacidad de transformación de la mayoría
social.
Voto fértil: El de quienes nominan consciente y solidariamente tras analizar
todas las posibilidades.
Los votantes somos
responsables de los fracasos y de los éxitos de los gobiernos que
colectivamente elegimos. Sería deseable que no lleguemos a sentirnos como
Humberto Eco cuando dijo: “No tengo nada contra Berlusconi, que hace su
trabajo, ni contra los fascistas, que hacen su trabajo, pero tengo muchas cosas
contra los italianos que los votaron. Me siento antiitaliano”. Cuando somos
sensatos y reconocemos las muchas desigualdades y desafueros de nuestra
sociedad, hemos de rechazar tajantemente la tesis retrógrada de la derecha
inmovilista, conservadora en el peor sentido del término, que "entiende que el
status quo es el camino hacia adelante".
Ojalá
acertemos todos con nuestra papeleta, decidida con responsabilidad y depositada
en libertad. Que sea un devoto voto gentil de reconocimiento a la labor
realizada previamente, más que a promesas futuribles; un grácil voto ágil, que
actúe con celeridad para mejorar tanta injusticia; un madurado voto cabal que
nos represente y nos proteja.
Publicado
en Sin Columna (1-3-2004), Sr. Director (28-2-2004), CyberEuskadi (Columna diaria, 28-2-2004), Kaos en la Red (28-2-2004), El Debate (IblNews, 28-2-2003), Foro Republicano (28-2-2004), Portal Miami (28-2-2004), Vistazo a la Prensa (28-2-2004), Foros EITB (28-2-2004), Uribe Kosta Digitala (27-2-2004), Estrella Digital (3-3-2004), El Confidencial Digital (3-3-2004), Revista Pangea (5-3-2004), LA PRENSA LIBRE (San José de COSTA RICA (5-3-2004), InfoNorte Digital (Canarias, 7-3-2004),...
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